

Días atrás, el equipo de Centro Integral Cardiológico Olavarría (CICO) llevó adelante por primera vez en Olavarría una cirugía coronaria de alta complejidad.
Se trató de una angioplastia con aterectomía rotacional, una “técnica que se utiliza cuando una arteria coronaria está severamente obstruida por placas de calcio o que tiene una obstrucción que no se puede dilatar con balón”.
De acuerdo a la información brindada por el CICO, “en estos casos se utiliza un cateter con una oliva impregnada de microdiamantes que al ingresar a la arteria obstruida gira a alta velocidad para pulverizar las placas calcificadas y preparar la arteria para dar paso a un stent que restablezca el flujo sanguíneo”.
Por último, es menester reconocer que en esta cirugía intervinieron los cardiólogos Marcos Hernandez y Ricardo Violante quienes expresaron el “orgullo de ser parte de este avance en el tratamiento de las enfermedades coronarias severas “.