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“La nuestra es una lucha política para demostrar que el pueblo puede y tiene que gobernar si es que queremos que haya una salida política en Argentina”. Las palabras son de Agustín Mestralet Szigety, precandidato a intendente por el Frente de Izquierda y de Trabajadores (FIT).
Mestralet es uno de los principales dirigentes del Polo Obrero en Olavarría y desde esa mirada social es que planteó que “los gobiernos que hemos tenido alientan la quita de derechos. Ante eso la izquierda se planta y propone una alternativa que es la única que va en defensa de la mayoría popular”.
Con Gabriel Solano como referente nacional, Mestralet plantea un escenario político local y nacional “dominado por candidatos que representan el poder económico concentrado. Todas las alternativas van en ese camino, algunas con una expresión más extrema de esa derechización, pero ninguna representa los verdaderos intereses de la gente”.
Habló de una “militancia cotidiana”, que no sólo funciona en tiempos electorales sino que está presente en los barrios, sobre todo los más vulnerables, acompañando en la organización de vecinos y vecinas para reclamar por derechos indispensables.
Así, la izquierda busca lograr una buena elección dentro de un escenario “donde dominan las candidaturas derechistas”.
Para Agustín Mestralet “no hay salida ni futuro si no hacemos un cambio profundo de las bases sociales y de los intereses de los que han gobernado”.
En la entrevista que ofreció a OlavarríaHoy, el precandidato a intendente por el FIT sostuvo que hay que hacer hincapíe en la salud, el trabajo y la vivienda. “Que haya un salario que alcance de acuerdo al costo de vida. Está bien lograr que ningún trabajador sea pobre, pero lo que queremos nosotros es que puedan vivir, y vivir bien. No alcanza con no ser pobre solamente”.
En este aspecto criticó que “el Intendente gane diez veces más que un trabajador municipal. O que un concejal gane medio millón de pesos al mes cuando un empleado del Municipio no llega a los 100 mil pesos. Es una locura”.
Y sostuvo que “tiene que haber una proporción entre los que ganan unos y los que cobran otros. Nosotros, como representantes populares, no cobraríamos más de 3 ó 4 salarios mínimos y en relación al Municipio porque no puede ser algo desconectado de la realidad que viven los propios trabajadores de Olavarría”.
El planteo va de la mano de una necesidad de “recomponer salarios, jubilaciones, ingresos familiares para el conjunto de la población”, apuntó mientras destacó que “nosotros vemos que ése es el gran problema del estancamiento y de la depresión económica en la que vamos. Hoy no hay un peso, no hay un peso para comprar lo básico pero tampoco le sobra a nadie para ahorrar, para hacer una inversión, para comprarse un modelo nuevo de auto o poder ahorrar para construirse una casa. Entonces, de alguna manera eso conspira contra el propio desarrollo económico”.
Habló también la necesidad de una reorganización del sistema de Salud olavarriense, con salas de Atención Primaria que hagan tarea de prevención en territorio y un Hospital más descentralizado, donde además se duplique la cantidad de turnos que atienda a la real demanda que existe.
“Hay que garantizar la presencia de médicos y de profesionales, que haya posibilidad de acceder a todas las especialidades para que la población de un barrio tenga un acceso directo a la salud”, sentenció Mestralet.
Y en esta línea, criticó la forma en que se implementó el sistema de turnos por Whatsapp. Lo definió como “perverso porque es muy difícil poder obtener el turno, la gente hace peripecias para conseguirlo”. Sumó también la cuestión salarial y de condiciones de trabajo del personal de Salud en Olavarría, con reclamos por mejoras que “no han sido atendidas”.
En este aspecto, planteó que “no hay una organización eficiente. Estas dos cuestiones no chocan, sino que son parte del mismo problema: tenemos acá un Gobierno municipal que no le ha dado la suficiente bolilla a la cuestión y que no ha invertido los recursos necesarios para eso. Ha puesto un montón de plata en obras, pero que terminan siendo cáscaras vacías”.
El acceso a la vivienda fue otro de los puntos que analizó Mestralet, en un contexto donde “este problema ha estallado nuevamente con una toma de tierras de vecinos que están al punto de vivir en la calle, muchos de ellos debiendo ya varios meses de alquiler o viviendo de prestado y no sabiendo hasta cuándo puede durar eso”.
Dijo que “esta situación no es nueva, es porque el intendente Galli no vio la realidad que estamos pasando hace años. Ya lleva 8 años de mandato y tuvimos no sólo uno sino varios episodios de tomas, tuvimos acampes frente al Municipio por la cuestión de la vivienda, grandes iniciativas de los vecinos para ver cómo se puede resolver esto, incluso con propuestas, con un planteo hacia el Ejecutivo de la necesidad de un banco de tierras público. Que sepamos los terrenos que están disponibles, que se urbanicen y que se invierta en un plan de viviendas realmente popular”.
Tanto el programa de viviendas TUVI del Municipio como el Procrear de Nación “son realmente un vasito de agua para un incendio forestal, porque tenemos una demanda de miles de familias reconocida por el propio Intendente: 4.000 familias que están anotadas en el Registro de Demanda Habitacional. Entonces, estos planes de vivienda no sólo son insuficientes en cantidad sino que además atienden a un sector de altos ingresos o de medianos ingresos, pero dejan fuera a los más vulnerables”.
La necesidad de vivienda “es una realidad que el Municipio no atiende, así como tampoco lo hace la Provincia ni la Nación. Es un común denominador de los distintos signos políticos que nos gobiernan”.
En este escenario político; de cara a las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias; el dirigente de la izquierda olavarriense analizó que esta la alternativa que representa significa “ponerse codo a codo con los más necesitados y por un cambio en la sociedad”.
En cuanto a las expectativas, dijo que “nos encantaría poder repetir los buenos porcentajes que tuvimos en la elección de 2021 porque nos dejaría muy bien colocados para las Generales. Nosotros llegamos a alrededor de un 6,5% que fue un récord para nuestra fuerza a nivel local. Si repetimos eso, estamos en mejores condiciones para pelear en las Generales. Entendemos que por más que no salgamos primeros podemos ser de los ganadores de la elección, sobre todo porque nuestro interés en esta campaña es lograr mayor presencia política y que gran parte de la población se vuelque a esta salida”.
La izquierda, resumió Agustín Mestralet, “es un voto para que no nos quiten más derechos, para que no nos quieran hundir más en la pobreza, por todos los derechos conquistados, para no perder todavía más”. Y la elección que se viene “va a ser un pronunciamiento contra eso”.