El Consejo Profesional de Ciencias Naturales celebró sus 40 años con un reconocimiento a su historia

El Consejo Profesional de Ciencias Naturales de la Provincia de Buenos Aires (CPCNPBA), creado por la Ley 10.353, celebró su 40º aniversario con un acto institucional realizado en el Centro de Ingenieros de la ciudad de La Plata. El encuentro reunió a autoridades actuales, ex presidentes, referentes académicos —entre ellos el decano de la Facultad de Ciencias Naturales y la Directora del Museo de La Plata— y destacadas personalidades vinculadas al mundo profesional.

El homenaje incluyó la entrega de una placa conmemorativa por parte de la Federación de Entidades Profesionales Universitarias (FEPUBA), como reconocimiento al recorrido y consolidación del Consejo a lo largo de cuatro décadas.

El CPCNPBA se creó en 1985, convirtiéndose en uno de los primeros organismos del país en representar y regular el ejercicio profesional de biólogos y geólogos. Su sanción fue resultado de un intenso trabajo legislativo impulsado por un grupo de pioneros que visualizaron la necesidad de otorgar identidad institucional y respaldo normativo a profesiones que, hasta ese momento, tenían escasa representación corporativa.

Con el paso de los años, el Consejo amplió su matrícula, diversificó sus líneas de acción y fortaleció su presencia en ámbitos públicos y privados. Hoy cuenta con más de mil matriculados y tres sedes en funcionamiento: la central en La Plata y dos delegaciones en Bahía Blanca y Mar del Plata. Este crecimiento sostenido se corresponde con el desarrollo de las ciencias naturales en la provincia y con el fortalecimiento del rol profesional en áreas estratégicas como ambiente, producción, minería, salud y territorio.

El actual presidente, Gonzalo Márquez, expresó la emoción y la responsabilidad de encabezar el Consejo en una fecha tan significativa. “Me tocó presidir en este aniversario y lo armamos con mucho cariño, sobre todo por las personas que impulsaron la ley. Fue una gesta difícil, y sin su trabajo no hubiéramos tenido la posibilidad de construir lo que hoy tenemos”, señaló.

Márquez destacó el camino recorrido por generaciones de autoridades que sostuvieron y reconstruyeron la institución incluso en momentos complejos: “Escuché muchas historias de expresidentes que contaban cómo, desde una oficina prestada, comenzaron a instalar el Consejo y a vincularse con las autoridades provinciales. Hoy tenemos un organismo consolidado, con sedes propias y una matrícula en crecimiento”.

El presidente explicó además que la biología vive actualmente un auge que potencia la diversidad profesional dentro del Consejo y complementa históricamente a la geología, eje fundacional de la entidad. “El desafío es seguir creciendo de la mano de ambas disciplinas y sostener lo que construimos”, afirmó.

En relación al contexto actual, marcado por discusiones sobre desregulación del ejercicio profesional, Márquez subrayó la importancia de la articulación institucional: “La defensa de la ética profesional la garantizan los propios profesionales organizados en consejos y colegios. Ante los embates que buscan diluir estos marcos, la coordinación con federaciones y la CGP es fundamental”.

La mirada de los pioneros

Entre los asistentes se destacó la presencia de Juan José Paladino, primer presidente del Consejo, quien evocó los inicios de la institución. “No teníamos nada: pedíamos oficinas prestadas, trabajábamos desde donde podíamos. Pero sabíamos que había que sostener esta idea y que las profesiones debían tener un ámbito propio”, recordó.

Paladino celebró el crecimiento logrado en cuatro décadas: la expansión de la matrícula, el fortalecimiento económico, la inserción en sectores públicos y privados y el recambio generacional dentro de las autoridades. “Hoy el Consejo está consolidado. Verlo así, después de haber sido parte de sus primeros pasos, es una gran satisfacción”, expresó.

A su vez, Eduardo Perurena, otro referente histórico y antecesor de Marquez al frente de la entidad, destacó el “espíritu de construcción colectiva” que permitió atravesar momentos difíciles: “Éramos pocos, pero estábamos convencidos de que la biología y la geología debían tener un ámbito profesional serio. La clave fue siempre el compromiso y la continuidad institucional”, y remarcó que "estos 40 años, fueron 40 años de crecimiento". 

Otro de los ex presidente, Rául Pérez Spina subrayó la importancia de haber logrado tempranamente un vínculo sólido con organismos provinciales: “Hubo años muy duros, pero conseguimos instalar la presencia del Consejo en áreas del Estado donde antes no había representación profesional. Ese reconocimiento institucional fue lo que permitió que el Consejo creciera en legitimidad y matrícula”.

Aportes académicos y perspectivas institucionales

El evento también contó con la presencia del decano de la Facultad de Ciencias Naturales de la UNLP, Eduardo Kruse, quien resaltó la importancia de la vinculación institucional y explicó que "lo hacemos a través de cursos, de conferencias, de distintos tipos de acuerdos y con distintos perfeccionamientos para que los profesionales puedan avanzar en su práctica en distintos ámbitos y puedan dar respuesta a las demandas de la sociedad".

Por su parte la directora del Museo de Ciencias Naturales, Marta Fernández, destacó el rol del Consejo en la articulación entre la academia y el ejercicio profesional. Señaló que la existencia del CPCNPBA permitió “jerarquizar carreras históricamente subrepresentadas” y fortalecer la presencia de biólogos y geólogos en la investigación aplicada, la gestión ambiental, el análisis territorial y el trabajo museístico.

Asimismo, Gabriela Rozas Denis, referente del ámbito científico y delegada del Consejo en Bahía Blanca, remarcó que los 40 años del CPCNPBA encuentran a la institución “en un momento de madurez y responsabilidad”. Enfatizó que el desafío actual es “seguir defendiendo la profesión frente a la tendencia desregulatoria, sostener la ética como eje central y acompañar el recambio generacional con participación activa de los nuevos matriculados”.

El 40º aniversario fue una oportunidad para reconocer a quienes impulsaron la creación del Consejo, valorar el crecimiento profesional del sector y reafirmar la importancia de contar con una institución que articule, regule y defienda el ejercicio ético de las ciencias naturales en toda la provincia.